Ruta del Vino de Rioja Alavesa

Experiencia del Vino

Un placer con nombre propio.

Encanto y embrujo. Son sensaciones que embargarán al visitante en la Ruta del Vino de Rioja Alavesa, donde un mar de viñedos infinito se une al patrimonio cultural y arquitectónico de sus villas medievales, que conservan todo el sabor del paso de la historia. Un paisaje cambiante y magnético, capaz de sorprender en cualquier época del año.

Productora de vinos desde hace generaciones, Rioja Alavesa ha sabido reinventarse conjugando los métodos de elaboración clásicos con la más moderna tecnología. En la zona conviven hoy bodegas tradicionales, bodegas en calados subterráneos y grandes bodegas de vanguardia que dibujan el perfil de la comarca, dominada por la imponente Sierra de Cantabria.

Impregnada de cultura del vino, la Ruta ofrece actividades enoturísticas, culturales y gastronómicas durante todo el año, segmentadas en propuestas diferenciadas para que cualquier viajero encuentre su opción perfecta, en función de sus gustos, intereses y preferencias, porque no hace falta ser un experto en vino para disfrutar de él.

La ruta del vino de Rioja Alavesa está en la Comunidad Autónoma Vasca.

Esta ruta del vino tiene mucho encanto.

Por una parte, el paisaje sorprende por la gran cantidad de viñas y la Sierra de Cantabria.

Por otra parte, las ciudades recuerdan el pasado de la Edad Media.

Las bodegas de la Rioja Alavesa producen vino desde hace muchísimos años.

Ahora hay bodegas tradicionales, bodegas modernas y calados. Los calados son bodegas bajo tierra.

Los visitantes de la ruta pueden disfrutar todo el año de actividades culturales y relacionadas con el vino y con las comidas típicas.

Las actividades están pensadas para personas que saben de vinos y personas que los prueban por primera vez.